domingo, 20 de mayo de 2007

Elecciones interesantes pero preocupantes

Antonio Trives



Atravesamos unas semanas en las que todos los partidos se encuentran en campaña electoral, donde estamos cansados de que nos repitan lo mismo una vez tras otra y que machaquen con promesas que luego muy pocas serán cumplidas. No va a ser menos el partido político GRIP (Grupo Independiente de Rojales) que junto al partido PSOE y PP conforman el panorama electoral de este año. Se trata del nuevo partido formado en la localidad de Rojales (al sur de la provincia de Alicante: Vega Baja). Os preguntaréis por qué me he fijado en dicho partido. Tiene la particularidad de estar formado por ciudadanos ingleses, alemanes, holandés y algún que otro español, según afirmó la presidenta del partido (de nacionalidad colombiana-británica) que residen en las urbanizaciones de Rojales, principalmente en Ciudad Quesada.

El grupo independiente declaró en una entrevista televisiva que no son “ni de derechas ni de izquierdas”. Uno de sus principales compromisos es que van a luchar para beneficiar a toda la comunidad y no a determinados individuos y empresas. También destacan la preocupación relacionada con el distanciamiento entre españoles y extranjeros, por lo que pretenden hacer más afectuosa las relaciones entre ambos. Entre todas las metas propuestas y declaraciones citadas por este partido, destaca sin duda alguna, las palabras que pronunció la alcadable el pasado 14 de Mayo: “estamos dispuestos a pactar con el resto de partidos pero obteniendo la Alcaldía”. Este nuevo partido cuenta con alrededor de 2000 afiliados, entre los que se encuentran una gran variedad de personas de nacionalidad extranjera, sobre todo europeos.

Rojales se encuentra en el segundo puesto de las localidades en las que la comunidad extranjera supera a la española. Justificando esto con cifras, se sabe que de 18.000 personas que hay censadas en el municipio, el 62,8% son de nacionalidad extranjera, lo que es lo mismo, algo más de 11.000 personas.

Por otro lado, de los 18.000 habitantes que hay censados en Rojales, 7.000 son los que van a decir el futuro del próximo gobierno local. El proceso electoral está compuesto por nueve mesas electorales. De ellas, siete están instaladas en el casco urbano mientras que las dos restantes están situadas en las urbanizaciones. Lo sorprende es que de las situadas en el pueblo van destinadas para 3.600 votantes, mientras que en las urbanizaciones votan 3.400 personas.

Estos son los datos relevantes que van protagonizar el panorama electoral de Rojales en las próximas elecciones.

El pueblo, es decir, los ciudadanos están inmersos en una gran preocupación, pues pueden ser gobernados por ciudadanos que llevan pocos años en Rojales en función de lo que es necesario para conocer realmente los problemas cotidianos. Como bien reflejan los datos, existe la posibilidad de que pacten con el partido que haya obtenido menos voto, y de esta forma llegar al poder o influir notablemente en él.

Señoras y señores lectores; hagan sus apuestas. ¿Ganará el PSOE con mayoría absoluta o con coalición? ó ¿Ganará el PP? ¿Llegará al poder el GRIP?

¿Qué ocurriría si salen vencedores? ¿Os podéis imaginar la reacción del pueblo? Los motivos no son discriminatorios por su condición de foráneos, solamente que no se les puede apreciar como los más indicados para dirigir el futuro de un pueblo.

¿Hasta que punto es acertada la diversidad y el grado de integración de otras personas?

Mi no entender

Manuel Lillo


Leyendo este artículo entenderéis que por desgracia no tengo mucho de lo que hablar. Como llevo haciendo desde siempre, he observado las últimas novedades políticas tanto en el País Valenciano como en el resto del Estado Español y la verdad, no me he decidido por nada, porque por desgracia todo es lo mismo de siempre. Y cuando uno no sabe de que hablar en estas fechas y no le queda otra que escribir, pues tiene que hablar de elecciones. Es repetitivo y resulta cansino, pero para los que no se hayan hecho una idea, nos toca soportar mítines hasta que se realice el referéndum.

Para no ser tan repetitivo, he considerado que en vez de hablar tanto de PP, PSOE y posibles pactos en caso de que no se obtenga una mayoría absoluta, podría hacer referencia a la multitud de curiosidades que nos encontramos si nos fijamos en cada uno de los partidos que se presentan aquí en nuestra zona. Y cuanto más lo piensas más curioso es, curioso por lo estúpido en todos los sentidos, porque son multitud de ideologías las que existen, pero por cada ideología podemos encontrarnos aproximadamente con cinco partidos. Digo que es estúpido porque esto da lugar a escaños desocupados y a veces incluso impide formar gobiernos de coalición. Parece que a muchos les interesa más salir en un cártel o en un anuncio de la tele antes que gobernar para aplicar en su ciudad las medidas que mejor considera.

Vamos a empezar por la ideología centrista, esos que tirando un poco más a la derecha o hacia la izquierda, se definen como tolerantes, gente que escucha y que responde, gente que piensa en el beneficio común puesto que son los que más votos suelen sacar. En este bloque siempre están presentes nuestros queridos PP y PSOE, quienes se reparten el pastel en casi todas las comunidades autónomas y por supuesto, en el Estado Español. Por suerte para algunos y por desgracia para otros, nuestros gobiernos no son más que un monólogo de estas dos fuerzas de centro - izquierda y centro - derecha, y en cada cambio de gobierno no nos encontramos más que tímidas reformas para contentar a pequeños sectores de la población como los matrimonios homosexuales, estatutos, trasvases y poco más. Ahora, el precio de la vivienda, la privatización de lo inimaginable, la construcción ilimitada o las políticas sociales tales como seguridad, sanidad o educación no quedan más que maquilladas por las palabras pero sin acción ninguna.

Pues bien, a parte de PP y PSOE ahora nos encontramos con partidos que quieren romper ese monopolio y participar de cualquier manera. Es el caso del Partido Social Demócrata, gente que presenta un plan y se aprovecha del descontento de la gente traicionada por los dos partidos mayoritarios que, cerrados en el empeño, no se atreven a votar a nada más que pase de ser denominado como centrista. El PSD es solo un ejemplo de esos partidos que están ahí bien para pactar en caso de no conseguir una mayoría autosuficiente, o bien para plantarse en las cortes y ser de centro - izquierda cuando gana el PP o de centro - derecha cuando gana el PSOE. Existen más partidos de este tipo como por ejemplo Vecinos por Alicante o multitud de partidos independientes en distintos municipios valencianos con el mismo fin que el PSD. Algunos ejemplos son el Partido Independiente de El Campello (Pideca), Partido Independiente de Borriol (PIBO), Partido Independiente de Vila - Real (PI), Gent de Denia, etc.

El caso de la izquierda es similar. Este sector siempre se ha dividido en izquierda nacionalista o izquierda a secas. Esta pequeña división no existe más que en los debates puesto que luego se suele acabar pactando, pero existen muchos más partidos de los que uno se puede imaginar. De los que yo tengo constancia sin haberme puesto a investigar, en la izquierda nacionalista tenemos al Bloc - Verds, el más representativo aquí en el País Valenciano; Esquerra, los de “somos nacionalistas pero es que nos gusta muchísimo Carod Rovira y por eso estamos en otro partido”; y partidos ya mucho más desconocidos como Estat Català. A pesar de estos que he nombrado, si hubiese tenido tiempo de investigar más, seguro que habría sacado tranquilamente tres o cuatro partidos más de este tipo.

Luego nos encontramos con la izquierda sin más, sin aspiraciones nacionalistas, aunque, todo hay que decirlo, defienden nuestra lengua y nuestros rasgos nacionalistas. Izquierda Unida es el partido más conocido en este grupo, pero nos encontramos muchos más: Partido Comunista, Partido Comunista de los Pueblos de España, Partido Nacional Republicano, Izquierda Democrática, etc. A muchos de vosotros os sonará a chino alguno de estos partidos, pero existen. Sus aspiraciones: ante todo el socialismo y la república. La consecuencia: como en todos los casos, falta de escaños, desunión por matices muy puntuales, incluso estúpidos y esto da lugar a la completa desorganización.

Por último podemos observar el caso de la extrema derecha, también dividida curiosamente en nacionalista y no nacionalista. El programa de las dos es común: acabar con la inmigración, parece que la gente que viene a limpiar nuestras casas, a recoger nuestras naranjas, a construir las obras o a vendernos clínex en los semáforos molesta a muchos, nunca lo he entendido, pero algún sabio dijo que hay gente para todo. La no nacionalista se basa en eso y nada más. La desunión es similar a la de la izquierda, pues nos encontramos multitud de partidos: Democracia Nacional, España 2000, Falange Auténtica (la de Jose Antonio), Falange de las JONS (la de Franco) y Falange Independiente (la falangista que te lo juro por mi madre).

La extrema derecha nacionalista se basa en expulsar la inmigración y en otra base que no deja de sorprenderme: “¡defensar lo balensià!” quieren acabar con lo que ellos llaman avance del catalanismo, ¿y su medio cual es? Cerrarnos TV3, la única televisión medio seria que podemos encontrarnos, exenta de programas del corazón y de series sudamericanas de sobremesa. Cortar un medio de comunicación, anular la libertad de expresión, esa es su medida tan democrática y justa. ¿Por qué? “perque som balensians, menxem paelle i escriguem aixina per no semblarnos als catalans que mos bolen llevar la nostro llengüe, frenem el seu avanç i fem una llengüe pròpio i distinte, vixca lo regne!”. No quiero incluir nada más para no encenderme, pero aprovecho para decir que no se censura un medio de comunicación desde antes de la democracia, y nuestros colegas del PP por la presión de grupos de extrema derecha valencianista están cerca de hacerlo. Bueno, a lo que íbamos. Hasta para esa ideología tan simple hay desunión, nos encontramos así con Unió Valenciana, un intento a lo PNV valenciano que por suerte nunca (o al menos hasta ahora) tendrá éxito; y Coalició Valenciana, los que en sus eslógans destrozan y martirizan nuestra lengua valenciana para diferenciarla del catalán, en fin. Las patadas al diccionario también están permitidas.

Como hemos visto, existen multitud de partidos de ideologías comunes divididos por matices estúpidos o por simples controversias. No quiero prohibir la creación de partidos, en absoluto, es un derecho fundamental de nuestra democracia. Pero si que quiero decir que esto da lugar a la desunión y a la desorganización, que las ideologías minoritarias nunca llegarán muy lejos por ser simplemente minoritarias, pero mucho menos si encima por cada razonamiento político encontramos cinco partidos, y cuando se demuestra que de esta manera no se llega ni al escaño… mi no entender. Por favor, dejémonos de divisiones absurdas y caminemos en una misma dirección en la medida de lo posible.

Voto visceral

Luis Fernández


Siempre me he preguntado por qué votamos, los motivos del voto. No de la acción, sino del contenido. Nunca he sabido cual es la razón de que elijamos a uno u otro partido, ni si estamos educados democráticamente.

Esto me hace reflexionar sobre si estamos correctamente guiados, si el gobierno es realmente el que la mayoría considera más eficiente o el resultado de un referéndum en el que gana el que mejor sabe motivar a sus votantes fieles, y si esto es útil. Hablando de fidelidad, en España parece que cada cual sabe el destino de su voto meses antes de que siquiera comience la campaña electoral (o de toda la vida), votamos por corazón, por los ideales que representan esos partidos que, aunque demuestren una y otra vez que son lo de menos, se empeñan en recordarnos que somos uno de los suyos y que no debemos faltar a nuestra cita con la historia en los comicios.

Me pregunto si no es hora de revisar nuestros valores y pensar en si queremos que ganen “los nuestros” o buscamos un país mejor, si deseamos un turnismo decimonónico o un sistema que de verdad nos devuelva la ilusión por la política. Estuvimos 40 años pidiendo libertad y una generación más tarde evitamos hastiados todo lo que tenga que ver con campañas políticas, dejando los porcentajes de votantes en niveles irrisorios que hacen, una vez más, que miremos el paradigma francés con sana envidia y admiración.

Quiero concluir reclamando una reflexión por su parte, pidiendo su visión sobre el motivo del voto, si es ético el voto útil, si nos vale el sistema o no. Si está desfasada nuestra democracia o si nos hemos estancado en las ideas.

viernes, 4 de mayo de 2007

La necesidad de la monarquía

Luis Fernández Bonilla


Con el nacimiento de un nuevo miembro de la familia real, se abre entre la gente de a pie el siempre polémico debate sobre la utilidad y el papel del Rey y sus descendientes en el estado español. Y digo entre la gente de a pie, porque no recuerdo haber escuchado ni leído nunca una crítica medianamente seria a la monarquía por parte de los medios de peso. La gente habla, pero nadie se hace eco.

Y con esto no quiero decir que la mayoría de los españoles sean republicanos o rechacen la monarquía, la cuestión esta ahí, pero un extraño inmovilismo temeroso evita que se plantee una alternativa formal a la actual forma de gobierno en España, una república a efectos, pero con una figura decorativa perfecta para adornar portadas del corazón y servir de relleno en la prensa diaria.

La monarquía parlamentaria hizo gastar a los españoles 9,05 millones de euros en 2006 entre yates, vacaciones en Mallorca, excursiones a Baqueira y viajes de paripé. Pero no es solo un argumento económico el que quiero exponerles, es además una cuestión de evolución, de justicia y de principios. Porque al final, todos los privilegios de la Casa Real son concedidos por historia, por una superioridad que se les presuponía a los descendientes de ciertas familias y que todos los monárquicos aceptan intrínsecamente.

No hay nada que agradecer a nadie. Muchos opinan que el Rey se merece su estatus por la gran aportación que hizo a la democracia. Faltaría más, con un pueblo ansioso de libertad y rebosante de esperanza una sola duda en cuanto a la sucesión de Franco habría sido fatal. La transición la hicieron los políticos, no los Borbones, si se tuvieran que agradecer todas las contribuciones en contra del franquismo habría más nobleza que burguesía. Acuérdense de Carrero Blanco… Y no solo es Zarzuela, porque un rey conlleva nobles y cortesanos, más de lo mismo, privilegiados de propiedades latifundistas que disfrutan de una fortuna heredada y protegida a lo largo de los siglos por el pequeño círculo que han conformado las altas esferas que dirigen el país.

Sé que la república no es, por supuesto, la panacea para los males de ninguna nación, pero si luchamos por la igualdad, por la equidad laboral, apoyamos a los sindicatos, la justicia social y nos escandalizamos con los políticos fraudulentos, reclamemos la ilegitimidad del derecho monárquico, de la imposición del poder y levantemos la voz contra la monarquía.

jueves, 3 de mayo de 2007

Electoralismo

Antonio Trives

Que época del año más linda estamos viviendo, ¿verdad? No me podéis negar que no es fabulosa y agradable. Reinan las temperaturas suaves donde a veces hace un poco de fresco y otras un poco de calor. También es una época de lluvias, en la que además de dar vida a la poca agricultura que queda, limpia el aire contaminado con el que tan familiarizado estamos. Que los campos se llenen de flores para unos les proporciona alegría y buen humor, para otros alergia.

Existen muchas más cosas que aún pueden hacer a este tramo del año llamado primavera, más atractivo. Pero la más importante de todas es que se acercan las elecciones municipales y autonómicas.

Que alegría se lleva uno cuando ve que unas obras públicas han finalizado o les falta poco, después de varios años de estar interrumpidas.

Las mejores primaveras se producen cada 2 años, ya que además de tener todos los rasgos anteriormente citados, se le complementa la aproximación de elecciones. En esta año en concreto, las municipales y autonómicas.

Si nos paráramos a pensar, nos daríamos cuenta que el 85% de las obras en infraestructuras y acondicionamiento de los pueblos o ciudades se producen en la recta final de la legislatura de cualquier gobierno; ya sea municipal, autonómico o central. Desde mi punto de vista, la estrategia que siguen la mayoría de los partidos políticos es:

Cuando comienzan unas campañas electorales, todos los partidos prometen y dicen la frase típica de cualquier político: “Si me votáis y salgo vencedor os prometo que…”

Una vez que sale vencedor el candidato, es cierto que al principio de la legislatura comienzan a hacer algunas cosas que prometieron. De esta forma los gobernantes quieren hacer creer al pueblo de que están haciendo lo prometido. Pero al poco tiempo, las obras se detienen, sin que nadie sepa el motivo, y lo que es peor, en muchos casos los ciudadanos no saben que se han detenido las obras.

A continuación pasan dos años, en los que apenas se aprecia que el gobierno haga infraestructuras, actos culturales, etc.…

Cuando llevamos ya casi 3 año y medio de los 4 que le corresponde a cada legislatura, comienzan a reanudarse esas obras que habían sido paralizadas. De esta forma nos quieren dar a entender de que el gobierno se preocupa y apuesta por satisfacer a los ciudadanos.

Para obtener un ejemplo solo tenéis que fijaros en vuestro pueblo, ciudad o lugar de residencia. Desde hace unos meses hasta mayo, os encontraréis con inauguraciones de plazas, carreteras, paseos, etc..

¿Y POR QUE NO SE HA HECHO ANTES?¿QUE CASUALIDAD QUE HA COINCIDIDO CON LA APROXIMACIÓN DE LAS ELECCIONES, NO CREEIS? SON ESTRATEGIAS PARA CONSEGUIR EL PODER

Con esto, además de hacer una crítica quiero que sirva para que la gente se fije en los actos de aquellos que nos gobiernan y representan, ya sean de nuestro partido de confianza o no.

NO IGNORES, MANIFIESTA TU INCONFORMIDAD

La independencia del poder judicial

Manuel Lillo


Es una de las bases fundamentales de nuestro querido Estado liberal y democrático: la independencia de los jueces ante todo tipo de poder. La imparcialidad de los tribunales a la hora de tomar una decisión, sin dejarse llevar por las influencias de poder político y ni mucho menos penalizando o absolviendo a favor de intereses particulares. Y no vamos a negar que es una base totalmente justa, democrática e imprescindible si queremos vivir sobre unos pilares que nos garanticen derecho, libertad y ante todo justicia.

Pero a mi me produce risa desde hace ya tiempo. Y es que conforme lees la prensa te das cuenta de que esta base fundamental no es más que una farsa, el poder judicial no actúa con el fin de establecer justicia, sino que favorece a quien dirige. La última demostración la tenemos en el caso ANV (Acción Nacionalista Vasca), al que me dirigiré como EAE ya que es su nombre oficial (Eusko Abertzale Ekintza).

Desde la ilegalización de Batasuna declarada por el señor Garzón hace pocos años, gobierno y oposición se han cambiado los papeles y no han parado de pasarse la pelota los unos a los otros tratando de afirmar que PP o PSOE han sido los culpables de los asesinatos cometidos por ETA. Estando el PP en el gobierno con Aznar al frente, PP y PSOE firmaron un pacto por las “libertades” en el que mediante argumentos necios disfrazados de libertad concedida al pueblo vasco pero que, al fin y al cabo, mentiras, consiguieron ilegalizar a Batasuna y dejar al 20% de la población vasco - navarra sin representación parlamentaria. Este pacto se ha roto, según el PP, por culpa de un gobierno irresponsable que ha decidido incumplir lo prometido. ¿De verdad se ha roto ese pacto? Yo creo que no.

Una vez aprobada esta ilegalización, distintas plataformas políticas trataron de presentarse a las elecciones autonómicas en Euskadi y Navarra como fueron Sozialista Abertzaleak, inmediatamente ilegalizados. Ahora algo ha cambiado. EHAK fue aprobado en su día con el gobierno de Zapatero, y lo mismo está ocurriendo ahora con EAE. Rajoy y el PP en general exigen al gobierno que lo que ellos llaman ETA - Batasuna, en este caso, EAE, no se presente a las elecciones. Todo esto después de una investigación judicial llevada a cabo por Baltasar Garzón, que no ha llevado a ningún lugar y visto lo visto EAE podrá presentarse. Y digo yo. Después de que un juez “independiente” haya investigado esta candidatura y no haya dado nada en su contra, ¿quién es el señor Rajoy para exigirle al Presidente que ilegalice la plataforma? Y si el señor Presidente definitivamente quiere hacerlo, ¿qué podría hacer? ¿exigírselo al juez? ¿obligarle? ¿o es tan solo otra piedra de las que gobierno y oposición se tiran continuamente?

Lo que está claro es que en la anterior legislatura, gobernada por el PP, distintas plataformas políticas eran ilegalizadas continuamente, con tan solo demostrar que se era de la izquierda abertzale, automáticamente quedabas ilegalizado. Ahora parece que la cosa ha cambiado algo. Y digo parece porque realmente no ha cambiado nada. EAE se presenta después de una investigación judicial, de la cual no me creo nada, porque estoy seguro de que con el PP en el gobierno, EAE no habría podido presentarse. Pero Batasuna sigue sin poder tener representación. Y es muy grave que en una sociedad democrática un partido político esté ilegalizado o dependiendo de unos jueces que lo único que hacen es obedecer a los de arriba.

Muchos dirán con esto que el gobierno de Zapatero es permisivo y tolerante, pero no nos olvidemos de que un partido que representa al 20% de la población vasco - navarra sigue estando ilegalizado y sin representación ninguna. Dicen que ETA no puede presentarse a las elecciones, es decir, equiparan Batasuna con ETA. Yo he visto a muchos etarras en las cárceles, pero aun no he visto a Otegi, Permach o Barrena y ya es raro, porque tal y como funciona la justicia, a la mínima se les puede culpar de algo. Igual es que no son tan etarras. Igual es que tanto a PP como a PSOE les interesa que este partido siga siendo ilegal y los jueces obedecen. O cualquier cosa, quien sabe. Pero se da el caso de que tras las actuaciones judiciales se mueven distintos intereses.